"Mundialmente, por lo menos una de cada tres mujeres ha sido golpeada, forzada a tener relaciones sexuales, o maltratada de alguna manera en el curso de su vida, donde el agresor es con frecuencia un familiar".Esta es una frase del artículo publicado en la página de United States Agency International Development (USAID), en el cuál explica que los efectos de la violencia son devastadores para la salud reproductiva de la mujer y para otros aspectos de su bienestar físico y mental, donde además de causar lesiones, la violencia lleva a que aumente el riesgo a largo plazo de la mujer a desarrollar otros problemas de salud, como dolores crónicos, discapacidad física, uso indebido de drogas de alcohol y de depresión.
El maltrato a la mujer ha venido desde tiempos en los que el hombre era la figura de todo lo que rodeaba a una sociedad y de alguna forma esa violencia se ha quedado durante muchas generaciones hasta nuestros días. Tanto así que el resentimiento del hombre, por ver que la mujer lo está destronando de su misma posición de líder de la sociedad, lo ha llevado a continuar con actos que no sólo repercute en el momento del maltrato, sino que también la deja marcada de una forma traumática a lo largo de su vida.
Pienso que este es un buen momento para hacer concientización de lo importante que es aprender a convivir en esta sociedad y un buen ejemplo para empezar con ello es ser más tolerante con tu prójimo.
Referencia:
http://www.infoforhealth.org/pr/prs/sl11edsum.shtml
Juan Luis Jiménez
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